Desde Ortuella: Lo que quiero sin querer // Iñaki Beitia.
martes, 6 de septiembre de 2011
Reflexión de F.Mayor Zaragoza
19 comentarios:
Anónimo
dijo...
Es un discurso que está en las antípodas de los dogmas que gentes endiosadas, que solo creen en la fuerza, se empeñan en inocularnos desde que tenemos uso de razón. Da gusto oirle. Todavía hay mentes lúcidas. Todavía hay esperanza.
Posiblemente escriba una barrabasada, pero llevo tanto tiempo pensándola que tengo que soltarla. En esto de la macroeconomía y sus complejos flujos y devenires hay tantos premios nobel como listillos a toro pasado (muy spanish, por cierto). La sensación desde la barrera de la ignorancia es que la inmensa mayoría de "expertos" no tienen ni repajolera idea de lo que pasa con esto de la crisis de los mercados y los estados. Todos opinan, aleccionan y se contradicen los unos con los otros. Mientras una entendida del FMI parlotea que puede haber otra recesión y que no debe cundir el pánico, horas después a los mercados les entra el pánico por sus palabras y asistimos al enésimo desplome financiero. Y todo a pesar de que un alto cargo de la UE desmienta lo que dice la entendida del FMI. Vamos, que una simple opinión sobre una simple hipótesis hace tambalear a las bolsas y a los [des]gobiernos, esos que ni mandan ni ladran. Así estamos; mirando los unos a los otros, desconfiando todos de todos, enfrentándonos a golpe de cifras, mientras unos cuantos mangantes joputas se hacen ricos ricos de verdad.
Aunque parezca mentira, la cruda descripción de Mayor Zaragoza se refiere a un país real de la UE en pleno siglo XXI. Es posible que la misma pudiera servir también para una situación como la actual de Israel. El caso es que las reivindicaciones de los indignados judíos poco tienen que ver con el problema al que se refiere Mayor Zaragoza. El que en una trágica etapa como la que atraviesa Israel sean toleradas, lo indica. Algo parecido se puede deducir de esos slogans del 15-M, de las reivindicaciones políticas y sindicales, etc.
Visto desde la distancia, se diría que indignados judíos y gobierno de Israel están condenados a entenderse; Los unos piden viviendas asequibles y el otro está ansioso por extender las colonias. Visto desde la distancia se observa cierto paralelismo con la situación de aquí; Los unos no quieren cambiar la constitución y al otro le interesa seguir con ella. Todos en nombre del estado de bienestar. En esa tesitura, es imposible estar de acuerdo con Mayor Zaragoza.
Menos mal que van a ser ya dos años que empezaron los brotes verdes. ¡Qué cara más dura tienen algunos!
Es un poco agotador la existencia de tantos intelectuales de salón que aplauden los principios de José Luis Sampedro o de Stephane Hessel durante un ratito y luego vuelven a sus foros de influencia mediática para pedir responsabilidad a los ciudadanos cuando debieran decir “entreguismo”. Si aplauden los cambios, que no sea por estética, sino por compromiso.
La mayoría no se va a enterar, pero al anterior presidente de Islandia se le imputa la máxima responsabilidad por los daños causados a la sociedad por la crisis y ha sido procesado. En los Estados Unidos se ha anunciado que las direcciones de algunos importantes bancos están siendo investigadas por lo mismo. Si Mayor Zaragoza habla en serio y vaya si lo hace, nuestros problemas son más que económicos y no se arreglan con un precipitado retoque constitucional. Toda la polémica que se pueda generar a su alrededor no es más que una cortina de humo interesada para continuar con mismo sistema y de paso evadir responsabilidades. Y los perjudicados volveremos a ser contados en noviembre.
Aunque la niñez, los amigos, las vacaciones, las fiestas, los amores, nunca son tiempo de crisis para el recuerdo, la prepotencia que no cesa seguimos teniéndola encima. El monopolio de las cámaras, los micrófonos y el papel prensa sirve para perpetuar un negro escenario, como el que describe Mayor Zaragoza, que desprestigia en el exterior. La UE en nuestro caso. El correquetecagas constitucional no engaña a nadie y no ha servido para rebajar la prima de riesgo. La deuda amenaza seriamente y aunque se pretende distraer al personal, nada bueno nos espera. Grecia, Italia, España y Portugal, no terminan de ser diferentes y las viejas alianzas tienen aun raíces. ¿Encajan en la UE? ¿Pueden cambiar?
Escuchar a una persona selecta y con altura de miras como Mayor Zaragoza te da esperanza, te sube el ánimo. Sin embargo ver a otros como tú penar por la Constitución, te deprime. Es muy triste ver que todavía queda gente dispuesta a gritar ¡Vivan las caenas!
Las palabras de Mayor Zaragoza nos reafirman en nuestra convicción de que quienes tenemos a la Constitución como un trágico error que condiciona generaciones, no somos monstruos aislados. Hay que agradecérselo a Plural/Anitzak. Mayor Zaragoza no es un novelista y el país que retrata no es un país imaginario; El cementerio de derechos que describe es el escenario en el que se desarrollan nuestras vidas y las de las que nos siguen.
Las situaciones de crisis tienden a poner de manifiesto el descontento popular, que puede llegar a desbaratar regímenes en apariencia sólidamente implantados, según vemos cada día. Cada uno habla de la feria según le va y toma precauciones según los medios de que dispone. Siguiendo esa lógica, si la crisis, que no elige países al azar, se prevé incómoda para nuestros estómagos agradecidos; ¿Como resultará para los de a pié?
Quien tiene los medios tiene estrategias para que no le pille el toro, pero tampoco es raro que no vea la situación como la ve Mayor Zaragoza o la padecemos nosotros. En este momento está desarrollando la idea de que hay dos opiniones dominantes; La de quienes quieren modificar un artículo de la Constitución y la de quienes quieren que siga tal cual.
A los situados no les interesa la tercera opción. La que está llamando insistentemente a nuestras puertas.
Muchos opinan que el actual proceso de modificación de la Constitución se inscribe perfectamente dentro de una normalidad con fuerte arraigo en nuestra historia. También hay quien denomina a la misma como “la reforma de Juan Palomo”. ¿No pueden tener razón ambos?
Mayor Zaragoza describe someramente el interesadamente enmarañado negro escenario de una tragedia sin resolver. No puede aportar datos porque los que se conocen, malos de por sí, no son fiables. En la UE lo saben. Sirve como muestra el que las corporaciones públicas en general estén anunciando una drástica reducción en sus organigramas directivos. Claro reconocimiento de su injustificada inclusión.
Las estratagemas que se utilizan para los sectores primario y secundario con objeto de calmar los ánimos de la población y de paso enmascarar las cifras de paro, no distraen grandes recursos y han servido mientras lo del endeudamiento ha funcionado. Además, las peonadas son baratas. Por otra parte, la desfavorable coyuntura hace que las empresas privadas que se están encontrando con organigramas obsoletos no duden en adaptarlos a los nuevos tiempos. En estos supuestos, la mayoría de los afectados pasa a incrementar las filas del desempleo, sin dejar mas huella.
Muy distinto es el caso de las personas que ocupan puestos ficticios bien valorados en el sector público o en actividades dependientes de él, como puede ser la financiera. Es una característica del sistema, que tiene muy mal encaje y peor solución cuando llega a convertirse en problema, que es muy a menudo. Porque el sistema tiene vocación de generar parados especiales, además de los comunes.
Chirac está siendo juzgado en Francia por haber creado falsos empleos para sus correligionarios siendo alcalde de Paris. ¿Que son los que se están suprimiendo aquí?
Aunque no sea mas que para no ser tan vulnerables a las crisis, necesitamos una transformación radical. Una ruptura casi absoluta con nuestro pasado que nos sitúe mas cerca de Alemania que de Italia. Es posible que nuestra idiosincrasia no lo permita, como aseguraba el caudillo, pero también es cierto que siempre tenemos salvapatrias a mano dispuestos a lo que haga falta para impedirlo.
Los Peperos y el PSOE lo tienen claro con su ideologia: “Dejemos que los ricos ganen mucho dinero y paguen pocos impuestos, porque las migajas saltarán al resto de la sociedad”, afirmarían directamente si ya no tuvieran el pequeño resto de pudor que todavía les queda.Unos lo dicen abiertamente otros lo dicen con los hechos.
Por lo que se ve, el motivo por el que los políticos miman a los ricos es que su objetivo final es que lo seamos todos. Los políticos se han puesto en su lugar para corregir defectos como la manía de cobrarles impuestos solo por ser ricos. Lo hacen para que todos nos esforzaremos en ser ricos como los políticos, en lugar de pasar el tiempo pensando en problemas que se arreglan con dinero, como la educación, el trabajo, la sanidad, etc. Si los políticos lo han conseguido; ¿Por qué no los demás?
¿Has sido tu alguien que ha gastado más de lo que debía? ¿Quién ha despilfarrado tanto dinero que ahora todo el país tiene esa deuda que TODOS debemos pagar? ¿Quién ha despilfarrado más de 700 mil millones de euros? Si conoces a alguien cuéntamelo al 944.21.70.60 , que le vamos a echar una buena reprimenda.
19 comentarios:
Es un discurso que está en las antípodas de los dogmas que gentes endiosadas, que solo creen en la fuerza, se empeñan en inocularnos desde que tenemos uso de razón.
Da gusto oirle. Todavía hay mentes lúcidas. Todavía hay esperanza.
Posiblemente escriba una barrabasada, pero llevo tanto tiempo pensándola que tengo que soltarla. En esto de la macroeconomía y sus complejos flujos y devenires hay tantos premios nobel como listillos a toro pasado (muy spanish, por cierto). La sensación desde la barrera de la ignorancia es que la inmensa mayoría de "expertos" no tienen ni repajolera idea de lo que pasa con esto de la crisis de los mercados y los estados. Todos opinan, aleccionan y se contradicen los unos con los otros. Mientras una entendida del FMI parlotea que puede haber otra recesión y que no debe cundir el pánico, horas después a los mercados les entra el pánico por sus palabras y asistimos al enésimo desplome financiero. Y todo a pesar de que un alto cargo de la UE desmienta lo que dice la entendida del FMI. Vamos, que una simple opinión sobre una simple hipótesis hace tambalear a las bolsas y a los [des]gobiernos, esos que ni mandan ni ladran. Así estamos; mirando los unos a los otros, desconfiando todos de todos, enfrentándonos a golpe de cifras, mientras unos cuantos mangantes joputas se hacen ricos ricos de verdad.
Aunque parezca mentira, la cruda descripción de Mayor Zaragoza se refiere a un país real de la UE en pleno siglo XXI. Es posible que la misma pudiera servir también para una situación como la actual de Israel.
El caso es que las reivindicaciones de los indignados judíos poco tienen que ver con el problema al que se refiere Mayor Zaragoza. El que en una trágica etapa como la que atraviesa Israel sean toleradas, lo indica.
Algo parecido se puede deducir de esos slogans del 15-M, de las reivindicaciones políticas y sindicales, etc.
Visto desde la distancia, se diría que indignados judíos y gobierno de Israel están condenados a entenderse; Los unos piden viviendas asequibles y el otro está ansioso por extender las colonias.
Visto desde la distancia se observa cierto paralelismo con la situación de aquí; Los unos no quieren cambiar la constitución y al otro le interesa seguir con ella. Todos en nombre del estado de bienestar.
En esa tesitura, es imposible estar de acuerdo con Mayor Zaragoza.
Menos mal que van a ser ya dos años que empezaron los brotes verdes. ¡Qué cara más dura tienen algunos!
Es un poco agotador la existencia de tantos intelectuales de salón que aplauden los principios de José Luis Sampedro o de Stephane Hessel durante un ratito y luego vuelven a sus foros de influencia mediática para pedir responsabilidad a los ciudadanos cuando debieran decir “entreguismo”. Si aplauden los cambios, que no sea por estética, sino por compromiso.
La mayoría no se va a enterar, pero al anterior presidente de Islandia se le imputa la máxima responsabilidad por los daños causados a la sociedad por la crisis y ha sido procesado.
En los Estados Unidos se ha anunciado que las direcciones de algunos importantes bancos están siendo investigadas por lo mismo.
Si Mayor Zaragoza habla en serio y vaya si lo hace, nuestros problemas son más que económicos y no se arreglan con un precipitado retoque constitucional.
Toda la polémica que se pueda generar a su alrededor no es más que una cortina de humo interesada para continuar con mismo sistema y de paso evadir responsabilidades.
Y los perjudicados volveremos a ser contados en noviembre.
Aunque la niñez, los amigos, las vacaciones, las fiestas, los amores, nunca son tiempo de crisis para el recuerdo, la prepotencia que no cesa seguimos teniéndola encima. El monopolio de las cámaras, los micrófonos y el papel prensa sirve para perpetuar un negro escenario, como el que describe Mayor Zaragoza, que desprestigia en el exterior. La UE en nuestro caso.
El correquetecagas constitucional no engaña a nadie y no ha servido para rebajar la prima de riesgo.
La deuda amenaza seriamente y aunque se pretende distraer al personal, nada bueno nos espera. Grecia, Italia, España y Portugal, no terminan de ser diferentes y las viejas alianzas tienen aun raíces.
¿Encajan en la UE?
¿Pueden cambiar?
Escuchar a una persona selecta y con altura de miras como Mayor Zaragoza te da esperanza, te sube el ánimo.
Sin embargo ver a otros como tú penar por la Constitución, te deprime.
Es muy triste ver que todavía queda gente dispuesta a gritar ¡Vivan las caenas!
Las palabras de Mayor Zaragoza nos reafirman en nuestra convicción de que quienes tenemos a la Constitución como un trágico error que condiciona generaciones, no somos monstruos aislados. Hay que agradecérselo a Plural/Anitzak.
Mayor Zaragoza no es un novelista y el país que retrata no es un país imaginario; El cementerio de derechos que describe es el escenario en el que se desarrollan nuestras vidas y las de las que nos siguen.
Las situaciones de crisis tienden a poner de manifiesto el descontento popular, que puede llegar a desbaratar regímenes en apariencia sólidamente implantados, según vemos cada día.
Cada uno habla de la feria según le va y toma precauciones según los medios de que dispone. Siguiendo esa lógica, si la crisis, que no elige países al azar, se prevé incómoda para nuestros estómagos agradecidos; ¿Como resultará para los de a pié?
Quien tiene los medios tiene estrategias para que no le pille el toro, pero tampoco es raro que no vea la situación como la ve Mayor Zaragoza o la padecemos nosotros.
En este momento está desarrollando la idea de que hay dos opiniones dominantes; La de quienes quieren modificar un artículo de la Constitución y la de quienes quieren que siga tal cual.
A los situados no les interesa la tercera opción. La que está llamando insistentemente a nuestras puertas.
Muchos opinan que el actual proceso de modificación de la Constitución se inscribe perfectamente dentro de una normalidad con fuerte arraigo en nuestra historia.
También hay quien denomina a la misma como “la reforma de Juan Palomo”.
¿No pueden tener razón ambos?
Mayor Zaragoza describe someramente el interesadamente enmarañado negro escenario de una tragedia sin resolver. No puede aportar datos porque los que se conocen, malos de por sí, no son fiables.
En la UE lo saben. Sirve como muestra el que las corporaciones públicas en general estén anunciando una drástica reducción en sus organigramas directivos. Claro reconocimiento de su injustificada inclusión.
Las estratagemas que se utilizan para los sectores primario y secundario con objeto de calmar los ánimos de la población y de paso enmascarar las cifras de paro, no distraen grandes recursos y han servido mientras lo del endeudamiento ha funcionado. Además, las peonadas son baratas.
Por otra parte, la desfavorable coyuntura hace que las empresas privadas que se están encontrando con organigramas obsoletos no duden en adaptarlos a los nuevos tiempos. En estos supuestos, la mayoría de los afectados pasa a incrementar las filas del desempleo, sin dejar mas huella.
Muy distinto es el caso de las personas que ocupan puestos ficticios bien valorados en el sector público o en actividades dependientes de él, como puede ser la financiera. Es una característica del sistema, que tiene muy mal encaje y peor solución cuando llega a convertirse en problema, que es muy a menudo. Porque el sistema tiene vocación de generar parados especiales, además de los comunes.
Chirac está siendo juzgado en Francia por haber creado falsos empleos para sus correligionarios siendo alcalde de Paris.
¿Que son los que se están suprimiendo aquí?
Que sencillo y que bien lo dice!
Esto va a explotar, y casi mejor que o haga por que parece que los partidos políticos no estan por la labor de hacer nada
Ya basta !
Aunque no sea mas que para no ser tan vulnerables a las crisis, necesitamos una transformación radical. Una ruptura casi absoluta con nuestro pasado que nos sitúe mas cerca de Alemania que de Italia.
Es posible que nuestra idiosincrasia no lo permita, como aseguraba el caudillo, pero también es cierto que siempre tenemos salvapatrias a mano dispuestos a lo que haga falta para impedirlo.
Los Peperos y el PSOE lo tienen claro con su ideologia: “Dejemos que los ricos ganen mucho dinero y paguen pocos impuestos, porque las migajas saltarán al resto de la sociedad”, afirmarían directamente si ya no tuvieran el pequeño resto de pudor que todavía les queda.Unos lo dicen abiertamente otros lo dicen con los hechos.
Por lo que se ve, el motivo por el que los políticos miman a los ricos es que su objetivo final es que lo seamos todos. Los políticos se han puesto en su lugar para corregir defectos como la manía de cobrarles impuestos solo por ser ricos.
Lo hacen para que todos nos esforzaremos en ser ricos como los políticos, en lugar de pasar el tiempo pensando en problemas que se arreglan con dinero, como la educación, el trabajo, la sanidad, etc.
Si los políticos lo han conseguido; ¿Por qué no los demás?
¿Has sido tu alguien que ha gastado más de lo que debía?
¿Quién ha despilfarrado tanto dinero que ahora todo el país tiene esa deuda que TODOS debemos pagar?
¿Quién ha despilfarrado más de 700 mil millones de euros?
Si conoces a alguien cuéntamelo al 944.21.70.60 , que le vamos a echar una buena reprimenda.
Trabajamos casi todo el día en cosas que no nos gustan para comprar cosas que no necesitamos
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